El hábito no hace al monje.
Dicen, los que saben, que es dífícil generar hábitos, pero que luego ya no se pierden.
No creo que sepan tanto.
O quizá tienen razón.
Una vez que pierdes, o abandonas, el hábito de la escritura, cuesta mucho volver a el.
Y, cuando de nuevo crees que tienes algo que decir, se te han olvidado los recursos para hacerlo.
Pero, al menos, has aprendido algo, que quizá esto no sea un sacerdocio, que quizá esto no requiere ocupación full-time.
Y, heme aquí, de nuevo. Más viejo e igual de sabio (que es una manera de decir "tan tonto como antes").
Perdón por la espera, no me ha dado tiempo de llegar más tarde.
4 comentarios
unjubilado -
- Jubi, ¿que has dicho?
¡¡Uyyy!!, quería decir "Que buen bloguero nunca abandona su blog"
Coooooo, un abrazo y re-bienvenido.
Okok -
...Ya era hora, por cierto :P
Vesania.- -
qué ganas teniamos!!!!
como te vuelvas a largar no sé que te hago!!!
Alpaca -
Jo, ya te has hecho desear...¿eh?
Me alegro apañero que vuelvas a tus orígenes. Y tranquilo que todos los que somos seguro que seguimos estando.
;)